Croacia en 7 días
Día 1: Split – Brac
Comenzamos nuestro viaje desde ACI Marina Split en la ciudad de Split, la cual será el lugar de salida más común junto a Dubrovnik si se quiere navegar por el Adriático.
Split es una de las ciudades más importantes de Croacia y su centro histórico fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, la cual te recomendamos que visites antes de embarcar.
Ponemos rumbo hacia la Isla de Brac y pasaremos la noche en Milna, un hermoso pueblo pesquero, tranquilo y con mucha historia que conocer.
Día 2: Brac – Stari Grad
Nuestro próximo destino es Stari Grad, situado en la isla de Hvar, y a tan solo 12 millas náuticas de distancia. Antes de llegar, fondearemos en la bahía de Tiha Luka, un maravilloso rincón paradisíaco donde reina el silencio y la tranquilidad. Es el lugar perfecto para nadar, bucear y montar un picnic en tu mismo barco para poder saciar el hambre entre cada chapuzón.
La «ciudad vieja», como se conoce Stari Grad, es una localidad donde, sobre todo, predominan los olivos y viñedos y es reconocida como el rincón histórico de Hvar. Es totalmente imprescindible visitar la Capilla de San Juan y el campanario de la Iglesia de San Esteban.
Día 3: Stari Grad – Hvar
Ponemos rumbo hacia el extremo occidental de la isla de Havar, la travesía perfecta para hacer por la mañana, disfrutando del sonido de las olas y un rico desayuno mientras tomas el sol.
Paramos en la isla de Scedro para probar la deliciosa cocina croata, la cual está influenciada por países como Grecia, Italia o España, es decir, al puro sabor mediterráneo.
En esta isla nos encontraremos con el famoso club Carpe Diem, donde podremos disfrutar de la vida nocturna de la isla.
Día 4: Hvar – Korcula
Seguimos en barco por la costa dálmata hasta llegar a nuestro próximo destino, el puerto de Korcula.
Antes de llegar a Korcula, nos permitiremos el placer de fondear frente a la pequeña isla de Badija. Una bahía compuesta por aguas totalmente cristalinas y turquesas que se funden con las antiguas minas romanas de piedra, el escenario perfecto para disfrutar de un buen almuerzo.
Cuentan en la historia, que el viajero Marco Polo nació allí mismo.
Sin duda, hay que probar el pescado fresco de sus restaurantes junto con el vino blanco de la zona.
Día 5: Korcula – Isla de Vis
Desde Korcula ponemos rumbo a la isla de Vis, el diamante en bruto de las Islas Dálmatas, pero que estamos seguros que con el tiempo será explotada.
Mientras tanto, disfrutaremos de sus playas de grava natural, sus aguas cristalinas y azules y sus numerosas cuevas, perfectas para practicar snorkel.
Una de las cuevas más famosas es Modra Spilja, o más bien, la llamada Cueva Azul, ya que tiene un fenómeno óptico que causa el sol sobre el agua de la gruta. Esta cueva de encuentra en la Isla de Bisevo (muy cerca).
Día 6: Isla de Vis – Isla de Solta
Nuestro último destino antes de volver a Split será la Isla de Solta, el máximo lugar de relax y descanso que podamos vivir a bordo.
Rogac es el puerto principal de la isla y la entrada a un pueblo pesquero con mucha diversión y ambiente durante el día, pero que sorprendentemente se vuelve silencioso y tranquilo por la noche. Algunos de los lugares más transitados por el turismo son Necujam y Stomorska.
Día 7: Isla de Solta – Split
En nuestras últimas horas las pasaremos surcando el mar Adriático, de vuelta a Split. Una vez en puerto, y si nos queda tiempo, visitaremos Split y nos dejaremos invadir por su ambiente mágico.